viernes, 30 de diciembre de 2011

Mejor hablemos de ciertas cosas

Acá nomás, cruzando el charco, en la tierra de José Artigas, Eduardo Galeano y Canario Luna, se dio un enorme paso en materia derechos civiles: la Cámara de Senadores uruguaya, en su última sesión del año, dio media sanción al proyecto de Ley de Salud Sexual y Reproductiva que despenaliza el aborto en las primeras doce semanas de gestación.

El proyecto fue aprobado por 17 votos de 31 y establece que “toda mujer mayor de edad tiene derecho a decidir la interrupción voluntaria de su embarazo durante las primeras doce semanas del proceso gestacional”, y obliga a todos los centros de salud, públicos y privados, a realizar su práctica.

Esta aprobación tuvo un respaldo total de la banca oficialista del Frente Amplio, y el presidente uruguayo, José “Pepe” Mujica, ya adelantó que, una vez aprobado el proyecto en la Cámara de Diputados, no rechazará la promulgación del proyecto de ley, contrariamente a lo que hizo el ex mandatario Tabaré Vázquez en 2008, quien vetó el capítulo que incluía la despenalización del aborto por “razones filosóficas y biológicas”. Además, encuestas han dado a conocer que alrededor del 63 por ciento de la población de Uruguay está a favor de la legalización del aborto.

Mientras tanto, en Argentina continúa la espera por una ley que regule el aborto legal, seguro y gratuito. A comienzos del mes de noviembre, la Comisión de Legislación Penal de la Cámara de Diputados había aprobado el proyecto pero, por falta de firmas, no se logró el dictamen y el debate debió interrumpirse.

El tiempo pasa y la mortalidad femenina por la práctica de abortos clandestinos continúa siendo una realidad que se puede suprimir y las víctimas, mujeres de los sectores sociales más desfavorecidos, continúan siendo anónimas y olvidadas. El debate es urgente, seguir posponiendo una legislación efectiva para que cada mujer tenga una decisión plena sobre su cuerpo es esconder la mugre debajo de la alfombra y no asumir una realidad palpable, en el día a día y desde hace generaciones.

La elección de ser madre tiene ser, justamente, eso, una elección y no una imposición de ciertas convenciones sociales que establecen que “toda mujer debe ser madre”. Se puede tomar el camino de Maru Botana, quien acaba de anunciar su octavo y felíz embarazo, o el camino contrario si es que una lo desea tomar. La elección es de cada mujer y la obligación de protegerla es del Estado; mientras el aborto siga oculto en la clandestinidad, un importante y necesario derecho sigue sin ver la luz.

Nota publicada en Babel Digital (29 de diciembre de 2011)

Recuerdos

“Porque en la selva, se escuchan tiros;
son las almas de los pobres, son los gritos del latino...”
Las Manos de Filippi.

Tenía 13 años cuando me levanté un miércoles 19 de diciembre, no muy temprano porque ya estaba de vacaciones del colegio, y mi mamá me decía que estaban saqueando los supermercados. Para ese día, la sobredosis de TV no tenía límites, ni tampoco el pánico. Recuerdo sentir miedo al salir al balcón de mi casa y ver a mucha gente pasando por la calle con changuitos de supermercados repletos de mercadería, luego ver esa misma imagen por televisión reproducida miles de veces y en distintos lugares del país. También recuerdo sentir miedo al ver la tristeza en la mirada de mis padres; sabía que tiempos difíciles estaban llegando.

“Crisis” se escuchaba y leía constantemente por los distintos medios. Yo entendía poco del contexto político del país en ese momento, pero no necesitaba mucho para percibir esas miradas desesperadas que con furia, hastío y, por sobre todas las cosas, hambre, tomaban los supermercados y arrasaban con todo a su paso.

Ya no había nada qué perder. El país había dicho “basta”, el país tenía hambre, y cuando tenés hambre y tus hijos también la tienen, es difícil pensar fríamente. La mierda había colapsado después de años de vivir en un mundo de fantasía llamado Primer Mundo.

La violencia terminó por instalarse definitivamente, Estado de sitio decidió el Gobierno Nacional y el pánico se incrementó. Para el 20 de diciembre, el entonces Presidente Fernando De La Rúa renuncia a su mandato y la imagen del helicóptero despegando del techo de la Casa Rosada aumenta la incertidumbre sobre el futuro. Para los días que siguieron, el “que se vayan todos”, salido de las venas abiertas de millones de argentinos hartos de corrupción, eran las palabras que sonaban una y otra vez.

Para el 24 de diciembre de 2001 no hubo Noche Buena, no había nada por qué festejar. Argentina sufría ciudadanos muertos, un desfile de presidentes, una guerra de pobres contra pobres, una muerte de la creencia en la política institucional. Una década parece mucho, pero en realidad es muy poco; habíamos caído, una vez más, en un pozo sin fondo pero que de a poco logramos salir, aunque todavía quede un largo trecho.

Nota publicada en Babel Digital (18 de diciembre de 2011)

viernes, 16 de diciembre de 2011

La mujer rota

Carla Figueroa, ese es el nombre que tanto escuchamos en los últimos días en los distintos medios de comunicación, pero por una noticia más que trágica y que, tristemente, se está convirtiendo en algo cada vez más habitual. Carla tenía apenas 19 años y fue asesinada por Marcelo Tomaselli, su marido, el mismo hombre que tiempo antes la había violado y que, por un pedido de avenimiento, dos jueces de un Tribunal de La Pampa le concedieron la libertad. La pareja se casó y, ocho días después de haber salido de la cárcel, Tomaselli la mató de diez puñaladas.

El avenimiento es un acto procesal en donde las partes que se encuentran vinculadas a un proceso judicial convienen en terminar con el juicio. Sería como una reconciliación de las partes en donde la víctima “perdona” a su victimario y es por eso que esa figura legal está cada vez más cuestionada. El juez de la Corte Suprema Raúl Zaffaroni expresó su repudio calificando al avenimiento como una “pieza arqueológica” dentro del Código Penal.

“¿Por qué el delito de violación es el único que puede tener esa excusa absolutoria? Sería más lógico que lo tuviera el robo: me llevo algo, lo devuelvo, pido perdón, en fin, arreglo la casa un mes, tiene más razón. Pero en la violación con violencia, violación propia, me parece que es una pieza arqueológica que quedó en el Código”, opinó Zaffaroni.

Por su parte, el juez de Audiencia Carlos Federico Pellegrino, quien había rechazado en primera instancia el mencionado pedido de avenimiento por parte de Tomaselli, expresó que fue quebrantada la Ley de Violencia de Género por parte de los jueces que aprobaron el perdón para el violador y luego asesino. “Entendíamos que no estaba en condiciones de igualdad: los informes psicológicos manifestaban un shock postraumático después de la situación vivida y se daba un caso de violencia de género. La Ley de Violencia de Género establece que todas estas situaciones no se pueden conciliar o mediar”, comentó Pellegrino.

La Ley 26.485 de Violencia de Género fue sancionada en 11 de marzo del 2009 y en su artículo 4 establece: “Se entiende por violencia contra las mujeres toda conducta, acción u omisión, que de manera directa o indirecta, tanto en el ámbito público como en el privado, basada en una relación desigual de poder, afecte su vida, libertad, dignidad, integridad física, psicológica, sexual, económica o patrimonial, como así también su seguridad personal”. En su artículo 6, la Ley establece que esa violencia puede ser: doméstica, institucional, laboral, contra la libertad reproductiva, obstétrica y mediática.

En el siglo XXI, en donde estamos comunicados constantemente, en donde las nuevas tecnologías nos invaden todos los días y en donde el wifi ya casi se puede respirar, la violencia sobre las mujeres es algo que luego de millones de años de humanidad sobre la Tierra todavía no ha podido erradicarse. Si analizamos cada uno de los tipos de violencia podemos constatar que son tan dramáticos como habituales. En la violencia doméstica, donde mujeres son golpeadas, amenazadas o disminuidas a través de insultos y agresiones psicológicas.

En la laboral, donde por el simple hecho de ser mujer tenga una remuneración menor o que llegue a ser despedida en el caso de quedar embarazada; en la violencia contra la libertad reproductiva, con la falta de una Ley de legalice el aborto y que le permita a cualquier mujer tener un control absoluto sobre su cuerpo; o en la mediática, que sólo hay que tomarse unos minutos para hacer zapping y encontrar la figura de la mujer dentro de los más degradantes y sexistas estereotipos de linda y tonta.

Según un relevamiento realizado por el Observatorio de Feminicidios, que coordina la ONG La Casa del Encuentro, solamente en la primer mitad del 2011 se registraron alrededor de 150 asesinatos de mujeres, de los cuales la mayoría de los casos fueron en manos de maridos, novios o ex parejas. La Casa del Encuentro, a través de su sitio web (www.lacasadelencuentro.org), define: “El término Feminicidio es político, es la denuncia a la naturalización de la sociedad hacia la violencia sexista (…) Es una de las formas más extremas de violencia hacia las mujeres, es el asesinato cometido por un hombre hacia una mujer a quien considera de su propiedad”.

Jean-Michel Bouvier, padre de Cassandre, una de las turistas francesas que meses atrás fueron violadas y asesinadas en la provincia de Salta, dijo en una carta publicada en el diario francés Le Monde: “… Se apoderó de mí la idea de que los actos cometidos, primero, contra su libertad de mujer, y finalmente contra de su vida merecían una calificación específica (…) El hombre que golpeó, violó y asesinó a una mujer porque es mujer y tiene una influencia física sobre ella, debería tener un castigo similar al de un crimen contra la humanidad”.

Las palabras de Bouvier, llenas de ira y dolor, son un grito desesperado a un pedido de justicia que ya lleva demasiadas generaciones de Carlas y Cassandres olvidadas. El Código Penal Argentino merece una revisión urgente, donde esté contemplada la figura del Feminicidio y en donde el avenimiento sea aplicado en casos más coherentes ¿O a caso, luego de una violación, puede existir algún tipo de perdón?

Nota publicada en Babel Digital (15 de diciembre de 2011)

miércoles, 30 de noviembre de 2011

Bandas Locales: un patrimonio uruguayense

En Concepción del Uruguay podemos encontrar historia, río, universidades, cultura, y, además, un factor que crece con el tiempo y progresivamente se conforma en un valioso patrimonio uruguayense: las bandas locales. Mejor: las Bandas Locales, así, con mayúsculas, porque si hay algo de lo que la ciudad no carece que es de música, para todos y todas, y para los gustos más variados.

Las Bandas Locales forman parte de un nuevo despertar dentro de la cultura local, la que representa a la extensa población joven de la ciudad y cada vez ejerce mayor influencia.

Cada fin de semana existe la seguridad que de alguna banda en algún lugar está tocando, el rock nunca falta. Ya sea grounge con Nuitilfaith, metal con Primer Ministro, punk con Chakota, reggae con Suma Paciencia, alternativo con Libres Esclavos, blues rock de los ’60 y ’70 con Black Velvet o hasta jazz con Champ, el menú se expande cada vez más. Por supuesto, sin olvidar los infaltables tributos a Fito Paez, Creedence Clearwater Revival, Redondos, Beatles y, por siempre, Joaquín Sabina.

La lista sigue: Helena Charleston, Hanomag, Bo-k Sucia, Sueños de Ruta, La Morza, Palenke, Casanova, Crisantemo, Turi Rastamám, Algún Ente, Oyabun, Tres Monos, The Paco’s, y la lista sigue y sigue y sigue.

No son estrellas, los podemos cruzar por la calle diariamente, son laburantes como vos y yo, no viven de la música, pero sí para ella. Ya sean estudiantes o profesores de música, o simples autodidactas que un día decidieron llevar su pasión al rock más allá, cada día en el que deben subir al escenario se entregan en cuerpo y alma a su público, a su música, y el esperado aplauso al final de cada canción que es la mejor fortuna que pueden recibir. Y eso es amor.

Con ustedes, señores: las Bandas Locales. Ovación de pié para todos ellos.


Nota publicada en Babel Digital (29 de noviembre de 2011)

jueves, 24 de noviembre de 2011

Violencia contra la mujer: culos y tetas en la TV

En la edición de hoy 23 de noviembre del diario Página/ 12 salió publicada una nota titulada “Para desterrar prejuicios”, referida a un informe presentado por el juez Raúl Zaffaroni a la Corte Suprema. Ese informe dio cuenta de un estudio sobre la cantidad de homicidios ocurridos en la ciudad de Buenos Aires. Entre los distintos números que aparecen en el trabajo se pudo observar que dentro del total de víctimas, el 14,29 por ciento son mujeres y de las cuales la mitad de ellas son asesinadas en situaciones de violencia intrafamiliar.

Este dato abre algo que pareciera que las generaciones, avances tecnológicos y cambios de era no pueden hacer desaparecer: la violencia de género. Mujeres que son asesinadas por sus parejas, violadas por extraños o prostituidas por grandes redes mafiosas. “Ella lo provocó”, “mirá cómo se viste”, “algo habrá hecho”, “si es una loca que se acuesta con cualquiera”, son comentarios del día a día que todavía no han podido erradicarse y, a veces, hasta son naturalizados.

Sin embargo, la violencia de género no sólo puede encontrarse en las páginas de la sección de policiales de algún matutino, sino también en momentos tan triviales, superfluos y, en apariencias, de entretenimientos: en el prime time de la televisión argentina y tinellizada. Ese programa que, bajo el maquillaje de una barata filantropía busca “cumplir un sueño”, no es más que la simple exhibición de culos y tetas.

Y a todo eso se lo llama éxito. ¿Cómo? De la venta constante de la mujer como un objeto plástico, sin intelecto y sin lugar para decir algo inteligente, lista para ofrecerse a cualquier hombre y que debe estar dispuesta a la más extrema osadía para estirar sus 15 minutos de fama.

Otro de los ejemplos de cómo el Método Tinelli encuentra más adeptos: Sábado Bus, ese programa revival de lo más menemista de los ’90, que tiene un segmento llamado Muñeca Bus donde su nombre ya lo dice todo. La elegida (alguna modelo, actriz o vedetonga) debe mostrarse en una enorme caja rosada, de la misma forma que la famosa muñeca, para luego salir de allí y bailar ratoneando a toda la platea masculina.

Y después recibir aplausos como si de un gran honor se tratase, como si cualquier mujer espera lograr ser en algún momento una Muñeca Bus. Algo que no quiso la jugadora de hockey Luciana Aymar, quien ya había anunciado con anticipación su negativa de participar en dicho segmento, pero Nicolás Repetto –el conductor del ciclo- no tuvo ningún reparo en comprometerla en vivo y en directo para obligarla a meterse en la infame caja rosada. Finalmente, Aymar accedió a la orden y fue una muñeca.

Ese simple hecho remarcó el verdadero lema del éxito de la TV: “No importa que seas deportista, no importa que pienses, no importa que nos representes en el mundo: estas acá, mostrá el culo”.

La violencia sobre la mujer tiene muchas aristas. Algunas que hacen eco en los noticieros y los diarios; otras, en cambio, se muestran edulcoradas, en horario central y apta para todo público.

Nota publicada en Babel Digital (23 de noviembre)

martes, 22 de noviembre de 2011

Editorial Tinta China: el despertar de la literatura joven e independiente

La editorial Tinta China trabaja en publicaciones independientes en las que jóvenes escritores pueden dar a conocer su trabajo. En una entrevista con Babel, Iván Hirschhorn, uno de sus creadores, contó cómo surgió el proyecto y de qué manera trabaja la editorial. “No existe el trabajo integrado de artistas, somos como manadas de locos sueltos y tirando para distintos lados”, afirmó cuando se le preguntó su opinión respecto de la movida cultural uruguayense.
Iván Hirschhorn, escritor, músico y creador de Tinta China junto a David Pietroboni, contó que la editorial nació hace tres años, a partir de la necesidad de hacer conocer su trabajo. Actualmente, los autores pueden acercarles sus materiales y ellos se encargan de asesorarlos tanto en el contenido como en las distintas formas de publicación. “

“Nosotros les decimos como pueden publicar por su cuenta y cómo publicar con nosotros y así tienen ambas opciones; la editorial busca conseguir el menor costo posible para el autor para que así pueda publicar”, explicó Iván.

Desde hace un año y medio sus publicaciones comenzaron a ser mas profesionales, tanto en su encuadernación, diseño y registro intelectual. A este ultimo Iván lo llamó “Copyleft”, que significa “que el libro puede ser reproducido, subido a Internet para su descarga, vuelto a imprimir”. “Lo que nos interesa como proyecto editorial y como autores es que la obra se mueva y la gente sepa lo que estamos haciendo”, explicó.

“En la editorial publicamos lo que nos gusta. Material de gente joven que quiera cambiar el curso de las cosas y apostar a algo nuevo. Les damos pautas para q hagan un trabajo dinámico; muchas veces uno a la hora de escribir tiene montones de ideas sueltas y a la hora de bajarla resulta que el pensamiento no funciona igual que el lenguaje”, comentó Hirschhorn. Añadió que desde Tinta China también dictan talleres de creación literaria en el museo Artemio Alisio, en donde además proponen la autopublicación.

“Actualmente hay un montón de gente escribiendo; antes te tenía que buscar una editorial y ahora hay una cultura opuesta donde la gente se auto publica. Por otro lado, Internet revolucionó el mercado y la forma de hacer y consumir arte, ahora están los blogs donde un autor puede actualizar cada dos días”, contó Hirschhorn.

En cuanto a la formación de un escritor, Iván opinó que lo esencial esta en “leer mucho y en estudiar a los autores que han creado grandes cosas. “Eso no significa copiarlos, sino en pensar su proceso y usar esa lógica para construir algo coherente. Eso sólo se aprende leyendo.”

Tinta China lleva cinco publicaciones: tres libros de cuentos, uno de poesía y uno de microficciones (relatos breves), además cuenta con una colección de libros de bolsillo llamada La Chinita, de poesía y microficciones. También han publicado revistas de historietas y han producido algunos discos de bandas. Los libros pueden conseguirse en Librería Universal de Concepción del Uruguay o a través de su página web tintachinaediciones.blogspot.com.

En referencia al nuevo despertar de la cultura en Concepción del Uruguay, Iván opinó que “hay mucha gente joven y talentosa con ganas de hacer cosas”. “Se ha sacado un poco de escena lo elitista que suelen ser las organizaciones tradicionales”, mencionó.

Sin embargo, agregó: “Por esta zona no existe el trabajo integrado de artistas, somos como manadas de locos sueltos y tirando para distintos lados. Está la música, el teatro, la literatura y son sectores que trabajan por separados; deberíamos organizarnos y trabajar juntos, que el arte sea algo integral y que haya una propuesta a nivel cultural más unificada”.

En ese sentido, comentó que para el próximo año están proyectando “un censo de artistas regionales con el que crear una red de trabajo integrado para que los miembros de la cultura puedan encontrarse entre si y en todas las disciplinas. Iván no dejó de remarcar que en el arte “siempre esta esa cuestión de ego, de que todos hacen cosas y que creen que lo suyo tiene mas valor por sobre el otro”.

“Es por eso que todos debemos reeducarnos y aprender que el trabajo conjunto es el que verdaderamente hace cosas”, reflexionó finalmente.

Nota publicada en Babel Digital (21 de noviembre de 2011)

Osvaldo Bayer pasó por Concepción divulgando la historia y el sufrimiento de los pueblos aborígenes del País

El escritor e investigador Osvaldo Bayer visitó Concepción del Uruguay para presentar su documental Awka Liwen (Rebelde Amanecer), el que cuenta los sucesos de la mal denominada Campaña del Desierto (1879) y la actual situación de las comunidades aborígenes en la Argentina, las que todavía reclaman por sus derechos. “En historia no se puede mentir porque siempre puede venir otro historiador y descubrirlo”, aseveró el escritor durante la actividad que fue organizada por la Comisión Memoria, Verdad y Justicia.

Eduardo Ojeda y Carlos Martínez Paiva, miembros de la Comisión Memoria, Verdad y Justicia, fueron los presentadores del invitado de honor, Osvaldo Bayer.

Tras algunas palabras de presentación por parte del escritor y periodista se dio inicio a la proyección de Rebelde Amanecer (Awka Liwen en lengua mapuche), el documental que le costó a Bayer una denuncia judicial en su contra por parte de la familia Martínez de Hoz por “agravar la dignidad familiar”.

Al respecto, Bayer comentó que les contestó: “La dignidad de la familia Martínez de Hoz ya fue agraviada por el Ministro de Economía que trabajó con la dictadura militar”, en referencia a José Alfredo Martínez de Hoz, partícipe civil de la última dictadura cívico militar argentina.

Awka Liwen relata los hechos poco conocidos de la Campaña del
Desierto en 1879, un capitulo en la historia argentina que se mal denomina como heroico. “En realidad significó la expropiación de tierras ancestrales de comunidades aborígenes, costó el asesinato 14 mil personas y la toma de prisioneros para repartir entre las familias de la alta sociedad porteña”, comentó Bayer.

La masacre fue liderada por Julio Argentino Roca, ministro de Guerra del entonces Presidente Nicolás Avellaneda, y cofinanciada entre el Estado argentino y la Sociedad Rural Argentina (fundada en 1866), para así repartir las tierras a conseguir entre unos 600 propietarios latifundistas. Entre ellos estaba Alfredo Martínez de Hoz que recibió en recompensa por su aporte al ejército de Roca unas 2,5 millones de hectáreas. Martínez de Hoz, fue uno de los creadores de la Sociedad Rural Argentina, y bisabuelo del que luego sería el encargado de la cartera de Economía de Jorge Rafael Videla.

“Roca fue un genocida y tiene un monumento en la ciudad de Buenos Aires a unos 110 metros de la Casa de Gobierno”, dijo Bayer y agregó que “con un grupo de ciudadanos piden que se quiete el monumento”. “Queremos que en ese lugar se haga uno a quien lo merece: la mujer originaria, quien en su cuerpo gestó al criollo”, sostuvo. “La historia oficial muestra a Roca como un héroe cuando ni siquiera anduvo a caballo, hizo toda la Campaña del Desierto en carroza y con un sacerdote al lado”, añadió.

“Tendríamos que aprender más de los pueblos originarios y eso significa la defensa de la naturaleza”, observó el historiador.

En otro punto de la charla con el público presente, Bayer hizo referencia al gobierno kirchnerista, del que destacó la “defensa de derechos humanos y los juicios a represores, la ley de medios, el matrimonio igualitario y la eliminación de las AFJP”. No obstante, también lo agregó a modo de crítica “la falta de una política para con los pueblos originarios”.

Finalmente, Bayer se manifestó sobre la actual situación del Museo Yuchán, del profesor Juan José Rossi, y dijo: “Como amigo de Concepción del Uruguay, le pido al señor intendente que por favor reabra el museo”. El Yuchán es un museo de culturas aborígenes creado por el historiador Juan José Rossi y en la actualidad se encuentra cerrado a raíz de que el edificio en donde estaba ubicado está siendo sometido a refacciones.

Nota publicada en Babel Digital (15 de noviembre de 2011)

“Todavía no somos conscientes del impacto que tuvo el 19 y 20 de diciembre del 2001”, aseveró Brieger en su paso por Concepción

El periodista especializado en política internacional Pedro Brieger, en su paso por Concepción del Uruguay, destacó a la cumbre de Mar del plata del 2005 en donde se rechazó al tratado de libre comercio, conocido como ALCA, como uno de los hechos más importantes para latinoamérica de los últimos años. También disertó sobre política internacional, los gobiernos neoliberales latinoamericanos de los ’90 y sobre la nueva consciencia y unión actual de los países de la región, entre otros temas.

Brieger fue invitado por la Universidad de Concepción del Uruguay para participar en la jornada de Cine Nacional. En este marco, ante un salón poblado de público, el periodista arrancó con su exposición refiriéndose a la actual crisis de Grecia y la comparó con la que Argentina debió atravesar luego del gobierno neoliberal de la década del ’90 (Carlos Menem). Proceso que había comenzado con la última dictadura cívico militar. “Se había creado todo un mito que íbamos a crecer e ingresar al primer mundo, con la timba financiera y sin el desarrollo de la industria”, expresó.

“El 19 y 20 de diciembre tuvo un impacto muy fuerte en América Latina y todavía no somos conscientes de ese impacto. Esa revuelta significó una respuesta de rechazo al modelo neoliberal; ahí cambió el mito, significó un quiebre”, contó el periodista.

Luego agregó que ese “quiebre” se vio reflejado en el 2005 con la Cumbre de las Américas, que se realizó en Mar del Plata, en donde se rechazó el tratado del ALCA. “Ese proyecto era un tratado de libre comercio que tenía como objetivo generar ganancias para empresas estadounidenses”, explicó el periodista. En este sentido, afirmó que para “los neoliberales la democracia y la pobreza no existen”.

En el marco de la cumbre de Mar del Plata, fue que Brieger introdujo la figura del ex Presidente Néstor Kirchner. “Realizó uno de los actos políticos más importantes de los últimos años en América Latina, donde enfrentó al presidente de los Estados Unidos y le permitió a

Hugo Chávez (presidente de Venezuela) decir ‘¡Alca al carajo!’. Eso le permitió a Kirchner tener un lugar importante en Latinoamérica”, comentó.

De cara ya en lo actual, el especialista en política internacional, observó que “hoy hay un cambio radical en el pensamiento y una transformación en América Latina cuando se habla de solidaridad”. “Hay un conjunto de gobiernos como Argentina, Uruguay, Brasil, Venezuela, Perú, que son muy heterogéneos pero que entienden que es necesario construir un modelo diferente y tener una mirada desde el sur”, aseveró.

Pedro Brieger es periodista especializado en política internacional y sociólogo. Participa como columnista en el noticiero de la Televisión Pública y conduce en el mismo canal Visión 7 Internacional. Por otro lado, en radio La Red, integra el staff del programa Marca de Radio que conduce Eduardo Aliverti. También en Radio Nacional tiene sus segmentos al igual que escribe columnas para la agencia de noticias Télam.

En el ámbito académico, es titular de cátedra de Sociología de Medio Oriente en la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Buenos Aires. Ha escrito varios libros entre los que se destaca El conflicto Palestino-Israelí, editado por Capital Intelectual, el que llegó a ser best seller.

Nota publicada en Babel Digital (11 de noviembre de 2011)

martes, 8 de febrero de 2011

Vamos las bandas

Ya es muy tarde en esa madrugada de sábado y cada vez más gente comienza a llegar al bar, buscando una mesa que le dé una buena vista hacia el modesto escenario donde en unos instantes se presentará la banda que será la protagonista de la noche. El público, entre ansioso y no tanto, se sumerge en el espeso humo de cigarrillo que flota y conversaciones triviales dicha a los gritos para tratar de escucharse por sobre el alto volumen de la música que el dj está reproduciendo. Los diálogos no difieren mucho entre sí, todas concluyen en un debate sobre cual es el mejor disco de la banda, cual fue su mejor época, qué temas tocaran esa noche. Hay mucha ansiedad porque la banda aparezca de una vez, todas las miradas están en el escenario que resguarda los instrumentos sin músico.
Lástima que los verdaderos protagonistas de los debates y las remeras no sean los que van a presentarse. No. Los verdaderos están a miles y miles kilómetros de distancia, algunos de sus integrantes muertos y otros con demasiados problemas de reuma o próstata para andar presentándose por ciudades del tercer mundo. Es por eso que este público se conforma con lo que están por ver: un premio consuelo, un producto de segunda marca. Lo que hay, y que encima lleva más de una hora de retrazo.
De repente las luces bajan y el dj detiene la música. Las estrellas sin brillo hacen su aparición y tocan el primer tema Algunos espectadores siguen la canción, otros miran un tanto desconcertados. La banda toca en cuerpo y alma, con ropa similar, con intento de movimientos parecidos, con la voz del frontman que parece desangrar su garganta para llegar a la voz del cantante original. Pero no son los originales, son genéricos.
Para el final de la segunda canción algunas personas abandonan el lugar, otras, las que estaban sentadas más atrás porque llegaron tarde y no encontraron algo mejor, se apuran por ocupar las mesas recién dejadas y se compenetran más con el show.
La banda sigue tocando, y sigue, y sigue, en nombre de sus ídolos que tan orgullosos estarían de ellos, por los que cualquier cosa vale la pena. El público, que cada vez se reduce más, parece crecer en espíritu. Ahora abandonan las mesas, las sillas y solo se acomodan en los saltos y en los pogos, en ese ritual pagano ofrecidos a los dioses del Rock.
Bandas tributos, gracias por existir. El rock & roll aún esta a salvo.

miércoles, 5 de enero de 2011

No se va a llamar mi amor

“Mi amor, no te puedo amar.
Estás prohibida, estás prohibida, ya.
Estás prohibida, pásenlo en la radio,
por mi amor”.
Charly García

Quien sea un adicto a los archi repetidos capítulos de Sex & the City conocerá que el eje constante de la historia a lo largo de sus seis temporadas fue siempre el mismo: la complicada relación de Carrie, su protagonista, con el problemático Mr. Big. Una relación de miles de idas y venidas, pero que siempre acababa con el corazón roto de Carrie, jurando no volver a verlo jamás, pero regresando como si de una adicción incontrolable se
tratase. Consciente todo el tiempo de que no iba a funcionar, de que Big jamás iba a aceptar el compromiso ni abrir su corazón, ella seguía insistiendo y seguía llegando a los mismos malos resultados.
Podrá ser una historia de ficción, pero la realidad está tan llena de historias similares como éstas que nos sorprenderíamos ¿Por qué insistimos en relaciones que no funcionan? ¿Por qué insistimos con personas con las que sabemos que no se va a llegar a nada? Relaciones tóxicas que solo tienen una sola definición: amor masoquista.
Daniela salió con Luciano durante un tiempo, ella estaba perdidamente enamorada de él y sabiendo de lo que se trataba: mujeriego, soberbio y egocéntrico, tan atractivo como peligroso. La relación terminó como se lo esperaba: en un engaño que Daniela tardó en superar. Tiempo después, conoce a Facundo y su relación era la ideal. Facundo le entregó todo el amor y el cuidado que Daniela podría haber pedido, pero algo se interpuso en su camino: Luciano, una vez más, metiéndose en la confundida cabecita de Daniela para enamorarla nuevamente y jurándole que ahora sí no la volvería a lastimar. Y Daniela dejó a Facundo, y volvió con Luciano, a pesar de las advertencias de sus amigas (“¿vos sos pelotuda?”), y adivinen como termina la historia… Y lo más trágico es que Daniela ya lo sabía.
Todos buscamos el amor verdadero, un compromiso real, como el que tuvo Daniela con Facundo, pero pareciera que necesitamos de ese grado de dramatismo en nuestra existencia, como si la estabilidad desestabilizara y tuviésemos que andar por la vida corriendo como drama queens a llorar por los rincones. Podríamos llegar a la conclusión de que a veces los seres humanos buscamos sufrir por amor, con personas que nos golpean constantemente, y nos dejamos, y hasta parece que nos gusta. Como le pasa a Fabio, que se enamoró de Belén, una chica tan intelectual como inestable, tan hermosa como conflictiva, una falta combinación que hizo fascinar al cegado Fabio que no vio (o no quiso ver) que la pobre Rocío soñaba todos los días con él esperando que le corresponda.
A sabiendas de que él o ella no nos convienen, disfrutamos de esos efímeros momentos juntos, en el goce del sexo, en la conexión que nos hace sentir tan bien con nosotros mismos. Pero disfrutar no parece suficiente, el problema va mucho más allá y radica en esa eterna obsesión por responder los molestos interrogantes ¿qué somos? ¿Hacia dónde va todo esto? ¿Hacia dónde vamos?
Porque como Rocío se enamoró de Fabio, que no deja de pensar en Belén, que está demasiado ocupada con sus mambos, Carrie volvió, una y otra vez, hacia los brazos Big, recibiendo sus besos y todos sus incontables golpes.